Atentado contra Trump
No había sucedido algo así, desde aquel intento de asesinato que sufrió Ronald Reagan, siendo presidente, en 1981.
SAN PEDRO GARZA GARCÍA, Nuevo León.- Lo ocurrido la tarde del sábado 13 de julio en Pennsylvania es algo muy grave para Estados Unidos… y tratándose de Estados Unidos, también lo es para el resto del mundo.
No había sucedido algo así, desde aquel intento de asesinato que sufrió Ronald Reagan, siendo presidente, en 1981.
El ataque a Donald Trump nos remonta a una época oscura de la historia del vecino país, hace más de medio siglo, cuando dos hermanos Kennedy, uno presidente y otro precandidato a la presidencia, cayeron abatidos por las balas de un asesino.
Es la violencia política que se ha incrementado dramáticamente en los últimos años.
Los crímenes de odio y la polarización han llegado a niveles históricos, algo que no se veía desde los atentados terroristas de 2001.
Y el propio Donald Trump ha sido causante: Al día de hoy no reconoce los resultados de la pasada elección presidencial… Provocó una radicalización en su país…. Alentó a sus fanáticos a cometer el asalto al Capitolio, el 6 de enero de 2021.
El uso explícito de la violencia jamás debería ser parte de un ejercicio democrático.
Aquí en México recién concluimos un proceso electoral, que estuvo manchado de sangre. Al menos 67 actores políticos, incluyendo 36 aspirantes o candidatos, fueron asesinados, en al menos 320 ataques cometidos entre junio de 2023 y junio de 2024.
En Estados Unidos un arma de fuego y un individuo dispuesto a utilizarla pudieron haber cambiado el curso de la historia.
En esta ocasión fue un joven de 20 años de edad, Thomas Matthew Crooks, quien fue abatido por agentes del Servicio Secreto, inmediatamente después de que disparó contra Donald Trump a 130 metros de distancia, desde el tejado de una fábrica contigua a la granja donde se desarrollaba el mitin. Era un residente de Pennsylvania, registrado como votante republicano. Carecía de antecedentes. Usó un fusil tipo AR-15 que había comprado su padre. Evidentemente, la facilidad para posesión de armas es otro grave problema. Se estima que en Estados Unidos existen 400 millones de armas en manos de civiles.
La política norteamericana ha dado un giro inesperado.
El sábado por la tarde, Trump hablaba de inmigración y criticaba el manejo de la frontera sur por parte de la administración de Joe Biden, a quien calificaba como “el peor presidente de la historia”, ante una multitud de seguidores congregados en el condado de Butler… “Y miren lo que pasó”, dijo Trump, cuando se escucharon los disparos.
Ese mismo sábado, el Presidente Joe Biden, quien insiste en contender por la reelección, reaccionó: “No hay lugar en Estados Unidos para este tipo de violencia… Es enfermiza… Es una de las razones por las que tenemos que unir a este país”.
El domingo, Biden hizo un llamado a la unidad nacional, en un mensaje difundido desde la Oficina Oval de la Casa Blanca. Instó a los estadounidenses a resolver sus diferencias “en las urnas, no con balas”.
Veremos si esas discrepancias se pueden resolver en paz, como propone Biden, debatiendo ideas, sin violencia política.
También Donald Trump hizo un llamado a la unidad. Pidió demostrar el verdadero carácter como estadounidenses y no dejar que gane la maldad.
Esta experiencia, ¿hará cambiar a Donald Trump?
Después de sobrevivir a este atentado, ¿dejará de polarizar y provocar odio?
Así se lleva a cabo la convención del Partido Republicano, en Milwaukee, Wisconsin, en la que Donald Trump es ungido como candidato presidencial… y por supuesto, ahora con mayores posibilidades de volver a ser Presidente de los Estados Unidos de América.
Pero de una vez por todas, el tono se debe moderar.
De lo contrario, la amenaza de violencia política, lejos de disminuir, aumentará más.
Acá de este lado de la frontera no nos queda más que observar… y aprender la lección para no cometer los mismos errores.
Soy Gregorio Martínez… Más Allá de la Noticia… Nos vemos y nos escuchamos… Aquí en POSTA…